La telépata (Asesino basado en personaje con copyrights)

 Buenas de nuevo gente, dandole vueltas a personajes de terror y demas siempre me vienen a la cabeza varios conocidos como piramide roja (post anterior del carnicero), hellraiser o en este caso carrie. Me parece un personaje fantastico del que podrian extraerse cosillas interesantes para aplicarlas sobretodo en mecanicas del juego. Intentando diferenciar un poco la historia del personaje original, que me parece una buena historia, voy a hacer una recreación ya que los chicos del dbd no son muy dados ultimamente a los copyrights aunque las mecanicas serian realmente de alguien con poderes telekineticos a excepción del tema de la sangre que si se extrae del personaje. 

 Wendy Corringtown era una jovencita que se crió en el seno de una familia en Alabama, la influencia y adoctrinaje de su familia era brutal simplemente porque no era una familia normal, pertenecian a una secta hipereligiosa con un dogma extremadamente represivo, ésto era un caldo de cultivo perfecto para los lideres, los cuales enseñaron a sus fieles que los abusos que realizaban con sus hijos eran designios de una entidad superior y que no debian decir ni impedir nada. 

 Wendy crecio sufriendo estos abusos de manera sistematica bajo la consensuada mirada de sus padres los cuales callaban y miraban hacia otro lado. Ella sabia que eran los designios de sus señor y los complacia gustosa, pero algo dentro le decia que eso estaba mál, muy mal. No tenian contacto con el mundo exterior y no conocia más que lo que estaba viviendo en el culto, ni siquiera sabia que habia un mundo totalmente diferente fuera de las alambradas de las basta parcela donde vivian todos.

 Siendo una jovencita cercana a los 17 años, un día uno de los escasos "amigos" de la secta que vivian fuera de allí , un abogado que llevaba todos los asuntos legales hizo una visita a uno de los "bendecidos" del culto justo cuando estaba ella en su casa. Como era costumbre ella se apartó con la cabeza gacha en gesto de sumisión total, pero era curiosa y no se apartó lo suficiente como para no escuchar lo que hablaban los dos hombres si ella se concentraba en escuchar. Le sorprendió que pudiera hacerlo tan nitidamente, incluso cosas que no pensaba que fueran posible decirse. 

 Los dos hombres hablaron sobre una vida y el mundo de fuera de allí, algo de unos documentos de propiedad o de ampliar la propiedad, y de muchas cosas más que ella no podia entender, lo que si que comprendió fue lo que ella siempre habia sabido por dentro, lo que allí ocurria estaba mal. Debian tener cuidado con lo que hacian allí porque no era legal (¿hablaban de la ley del señor?) y que evitaran hacer marcas a toda costa en los cuerpos de los jovenes ya que al entrar habia visto los brazos de la chica. 

 Desde ese momento se su mente cambió radicalmente, se empezaba a sentir sucia por lo que hacia y le hacían, y comenzó a llorar. Al salir de la casa, el abogado se acercó a ella y con un gesto cariñoso le enjuagó las lagrimas a la chica. 

 - ¿Porqué lloras pequeña? 

 Seguidamente la agarró por la cara y le dio un beso fuerte y duro en la boca. Algo moria por dentro de ella cuando pasó, y mas aun cuando la mandó dentro de la casa para terminar su deber hacia el "bendecido", el miedo casi ya estado de pánico se apoderó de ella brevemente pensando en lo que tenia que hacer. Pero como buena chica obedeció sin rechistar con nuevas lagrimas en los ojos y entrando en la casa muy despacio, su mente hervia de emociones horribles, pero era fuerte he intentó desviar esos pensamientos fijandola en otra cosa, momentos después se dio cuenta realmente de que no estaba a una distancia cercana como para poder oirlos, y menos aun tan nítidamente, realmente habia salido de la casa y habia estado sentada en el porche. Se concentró en ese pensamiento, lo encerró dentro de una habitación junto con ella misma mientras el resto de pensamientos golpeaban brutalmente la puerta de esa habitación mental. 

 Intentar mantener ese pensamiento en su mente fue lo único que la hizo soportar lo que vino despues. Al llegar a su casa, lo único que pudo hacer era llenar la bañera con agua caliente y restregarse la pastilla dura de jabón con fuerza, mucha fuerza por todo el cuerpo incluso haciendose daño o acabando sangrando. Entre suplicas y plegarias al señor, así terminó el primer día de su despertar. 

 No pasaron muchos días hasta que otro de los "bendecidos" la reclamó para él, y el ciclo comenzo, buscó un pensamiento agradable o curioso en el que concentrarse mientras el resto intentaban tirar abajo la puerta de su habitación del panico mental. Después tocaba purificar su cuerpo y suplicar al señor por su salvación. Despues de cumplir los 17 años, mientras la habian reclamado, los pensamientos que golpeaban la puerta de su habitación mental habian bajado de intensidad, solian golpearla pero no tan fuerte ni de manera continua, fue entonces cuando se percató que dentro de la habitación no se encontraba sola con su pensamiento salvavidas, si no que también empezo a escuchar un susurro que se habia ocultado en un rincón desde siempre, al acercarse para ver que era, se dió cuenta de que no era suyo, si no de la otra persona, podia escuchar lo que pensaba, lo que queria, ver sus sentimientos y verdades más ocultos. Lo que vio allí y escucho del "bendecido" la aterrorizó hasta el extremo. 

 Al irse de aquella maldita casa estaba horrorizada por lo que habia descubierto, empezaba a saber y entender. Al ir caminando y cruzandose con otra gente, empezó a captar los pensamientos de más y más personas. Las de los bendecidos eran autenticas abominaciones que iban en contra de lo que mandaba el señor, pero lo pensaban. El resto de gente eran pura melancolia y devoción. 

 Al llegar a casa comenzó su ritual de purificación con mas ansia que nunca entre unos lloros irrefrenables, esto llamó la atención de sus padres los cuales la interrumpieron he intentaron detener ya que eran incapaces de entender que ocurria, esto hacia que Wendy se enfureciera, ¿como era posible que sus propios padres no la protegieran como manda el señor? ¿Tan ciegos estaban?, esto hizo explotar algo dentro de ella, haciendo que les recriminara y le echase las culpas de todo. Ellos simplemente pensaron que habia sido endemoniada con esa actitud tan rebelde y obscena y debían ir a decirselo a los bendecidos del culto para expurgarla o exorcizarla. Wendy en ese momento entró en furia totalmente y los objetos cercanos empezaron a volar violentamente sin control, varios objetos contundentes golpearon a su madre muy fuertemente hasta que uno finalmente le destrozó la cabeza, su padre horrorizado salio corriendo, pero no llego muy lejos ya que en la cocina empezó a flotar mientras su hija desnuda lo perseguía, la cual totalmente fuera de control arrojó mentalmente los cuchillos y demas objetos cortantes o punzantes de esa precaria y destartalada cocina. El padre acabo atrabesado por multitud de objetos.

 Momentos después empezaron a aparecer devotos que se acercaban a la pequeña casita escandalizados por los gritos de sus habitantes. Los cuales contemplaron incredulos la dantesca escena. Los padres muertos y la hija desnuda cubierta de sangre. Wendy estaba conmocionada por lo que habia ocurrido, no recordaba mucho de lo que habia pasado pero si lo suficiente para saberlo, lo que mas le volvia a la cabeza era lo que sintió con esa rabia acumulada. Ahora estaba cubierta de sangre pero eso no le desagradó en absoluto, mas bien al contrario. Deprisa y corriendo le habian puesto uno de los recatados vestidos blancos con falda larga, mangas largas y estilo antiguo muy adecuado para tapar todos los sus pudores. 

 La llevaron a la iglesia y tocaron las campanas para reunir al culto, una vez hecho esto la colocaron donde el púlpito con los bendecidos entorno a ella acusandola del pecado de parricidio, de su salvajismo y de estar poseida por el demonio, cosa que ella misma también creia. Estas acusaciones alteraron al tumulto el cual le lanzaba acusaciones, improperios y objetos. Ella podia sentirlo todo a la vez, sentirlos y leerlos a la vez, tan simples, tan engañados, ella conocia la verdad y cerca de ella estaban los verdaderos demonios. Intentó hablar, pero nadie la dejaba, intentaba acusar los actos impuros de los "bendecidos" pero nadie la escuchaba, solo gritaban mientras los otros solo pensaban maldades y perversiones, incluso uno de ellos imaginó lo que haría con el cadáver de la chica.

 Este sin sentido la enfurecia totalmente, ¿porqué no me escuchan? Solo yo sigo las palabras del señor ¿porqué me odian por ello?. Los golpes recibidos, los improperios de los que hasta hace nada eran sus amigos y las perversiones de los despreciables se habian acumulado, solo faltó un "simple" tocamiento fisico por parte de uno de ellos para explotar. La chica se elevó casi imperceptiblemente apoyandose sobre las puntas sus pies, los despreciables salieron volando en todas direcciones y la gente entró en panico. Despues de unos momentos de incertidumbre, se lanzaron hacia las puertas de salida, las cuales se cerraron bruscamente delante de ellos y toda clase de objetos empezaron a flotar en todas direcciones golpeando a todos los presentes, rompiendose y clavandose o cortando despues. Algunos se abalanzaban sobre ella para intentar pararla, pero salian disparados y golpeados por el aire, no habia nada cerca de ella pero era como si tuviera un equipo de boxeadores de los pesos pesados protegiendola. 

 No tardó mucho en quedar en silencio el interior de la iglesia, nadie a excepción de Wendy habia sobrevivido, ella estaba cubierta de sangre la cual parecía que incrementaba su furia y su fuerza. Ahora calmada estaba feliz, sentia paz y ningun pensamiento ajeno la perturbaba, exceto un pequeño resquemor, un susurro débil que la atraia y la repelia de igual manera. Ese susurro la acerco hacia el despreciable con el que comenzó todo, aun recordaba la conversación con el abogado y como los oía desde el porche de la entrada de la cada, ahí se dio cuenta que no fue sus voces lo que escuchó, si no sus mentes. Él despreciable estaba agonizando y fatalmente herido, pero eso no le importó, aun estando en calma sabia que podia levantarlo y lo hizo, lo puso a flotar delante de ella entre gritos de dolor y desesperación del hombre, cosa que le dió igual, se lo llevo de allí y en esta ocasión fue ella la que hizo con él las perversiones violentas que quiso. Los gritos de dolor se alargaron gran parte de la tarde-noche hasta que al final se acallaron. 

 Algo empezó a llamarla en su mente, algo calmado, dulce, poderoso he igualmente obsceno, era algo que la conducia de vuelta a la sala donde estaban todos sus conocidos, el suelo estaba lleno de sangre y de repente se empezo a condensar la sangre en el centro de la habitación formado un charcho. Algo la llamaba desde él, algo la impulsaba a introducirse en la sangre. Le preguntó si era su señor, él le respondió que no, pero que ella era realmente libre de elegir a que señor seguir o que camino coger, si iba con él nadie más le haria daño pero que ella podria hacer lo que quisiera si era realmente lo que deseaba. En ese momento Wendy eligió por fin su camino...